INTERCAMBIO
Se aproximan mis manos suplicantes
al filo donde tiemblan nuestras almas;
cediendo las veredas de mi sangre
al intercambio sutil que reclama,
ser la fuente de luz para sanarte.
Así diluyo mis noches de pánico
entre nubes sombrías e incesantes,
y que adormezcan nuestros tristes pálpitos
en el frío de oscuras soledades.
Se cobija mi ser en tu suspiro
mientras guardo en tu barca mi bagaje.
Si la cruz en mi pecho fuese espino,
partiríamos juntos a tu amarre.
Cómo magulla mi amor la embestida,
laberinto en la alcoba de clamores,
nos apresa el dolor en su malicia
y cubre de fantasmas las pasiones.
Estoy muriendo un poco, cada día;
mi corazón en la quejumbre implora
el libar de tus mieles mientras viva,
plegada entre el cardumen de tu aroma.
Contemplo el mundo en la paz de tu orilla
en halos y lazadas que se enredan.
y resurjo entre azogues de la vida
si alumbras mi camino, tú mi estrella.
Carende
Se aproximan mis manos suplicantes
al filo donde tiemblan nuestras almas;
cediendo las veredas de mi sangre
al intercambio sutil que reclama,
ser la fuente de luz para sanarte.
Así diluyo mis noches de pánico
entre nubes sombrías e incesantes,
y que adormezcan nuestros tristes pálpitos
en el frío de oscuras soledades.
Se cobija mi ser en tu suspiro
mientras guardo en tu barca mi bagaje.
Si la cruz en mi pecho fuese espino,
partiríamos juntos a tu amarre.
Cómo magulla mi amor la embestida,
laberinto en la alcoba de clamores,
nos apresa el dolor en su malicia
y cubre de fantasmas las pasiones.
Estoy muriendo un poco, cada día;
mi corazón en la quejumbre implora
el libar de tus mieles mientras viva,
plegada entre el cardumen de tu aroma.
Contemplo el mundo en la paz de tu orilla
en halos y lazadas que se enredan.
y resurjo entre azogues de la vida
si alumbras mi camino, tú mi estrella.
Carende
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