RIESGO

¿Riesgo?

¿riesgo de repetirme,
dices?

Es posible...,

vamos, a decir
verdad, es más que probable...

Al que cierne
y amasa, de todo le pasa.

¿Y qué?

Allá
a dónde mires,
verás
repeticiones.

No quisiera
parecer
sarcástico, pero ¿no se repite
a diario el abuso,
el insulto,
el abandono,
el cinismo,
el hambre,
la enfermedad?

¿No campa
a sus anchas por el mundo,
la repetitiva y lacerante injusticia?

Por qué das
pues
tanta importancia a que pueda
repetirme
en unas docenas de versos?

Ese comentario
te sobra...

No creas
que lo digo
porque me sienta
dolido. Te agradezco
la observación, de verdad,

pero
mira qué te digo
yo también: corrige
el punto de mira

¿Qué daño
puede hacer
un aprendiz de poeta,
cayendo
involuntariamente en la repetición?

Poco.

Apenas nada.

En cualquier caso,
a él mismo,
y,
ni eso,
es seguro...

Iría
ello en función
de los poemas y su mensaje
¿no te parece?

Si los versos
afectados
hablaran de amor,

de paz,
de justicia,
de libertad,

déjalos
que se repitan,
déjalos..., déjalos...

(Luis)